Voces de Expertos
por
Juan Antonio Mújica García
La Nueva Escuela Mexicana y la transformación del Sistema Educativo Nacional
6
de
November
de
2024
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https://doi.org/10.60647/jhpg-e159 A partir del ciclo escolar 2024-2025, las universidades tecnológicas y politécnicas del país implementarán la propuesta curricular conocida como la Nueva Escuela Mexicana. Este marco educativo fue puesto en marcha por la Secretaría de Educación Pública del gobierno federal a partir del ciclo escolar 2022-2023, mediante un programa piloto en algunas escuelas públicas del país y, al cierre del ciclo escolar 2023-2024, se aplicó en el resto de instituciones públicas de educación básica y media superior. Tomando como base las epistemologías del sur, pero también el modelo de competencias, la Nueva Escuela Mexicana amalgama conceptos, teorías y discursos para promover una formación integral y sostenible que transforme, en su sentido último, la relación entre las y los estudiantes con su mundo. Por ello, el presente escrito da a conocer los criterios educativos que regulan al emergente modelo educativo, con el propósito de identificar las principales características que están sentando las bases de la educación pública contemporánea en México. Este proyecto educativo de corte humanista, crítico y comunitario, sin desconocer las directrices de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), pretende transformar la educación mexicana, a través de la conformación de inéditas comunidades educativas.

Palabras clave: Criterios educativos, Epistemologías del Sur, Nueva Escuela Mexicana  

Introducción

La Nueva Escuela Mexicana es un marco curricular que emergió a partir de una reforma a los artículos 3, 31 y 73 de la Constitución política mexicana, tal y como lo establece el Decreto del 15 de mayo del 2019. Esta reforma constitucional propició modificaciones tanto a la Ley General de Educación como a la Ley General de Educación Superior, en los años 2019 y 2021, respectivamente. A partir del ciclo escolar 2022-2023, la Secretaria de Educación Pública implementó el nuevo modelo educativo en algunas escuelas públicas de educación básica y, al cierre del ciclo escolar 2023-2024, se aplicó en el resto de instituciones públicas de educación básica y media superior del país. Sumado a lo anterior, a partir del ciclo escolar 2024-2025, le corresponde a las universidades tecnológicas y politécnicas llevar a la práctica esta propuesta curricular y lograr con ello una reorientación integral del Sistema Educativo Nacional.    

Las epistemologías del sur y los criterios educativos

Si bien, convendría cuestionar si la Nueva Escuela Mexicana es nueva y mexicana sobre la base de que esta estructura curricular se asienta en el modelo educativo basado en competencias, sin desconocer, a su vez, las directrices de organismos supranacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), cabe señalar que, la Nueva Escuela Mexicana también se fundamenta en las epistemologías del sur e incorpora en su currículo una visión descolonial, inclusiva y crítica. Por lo que se puede asentir que este proyecto educativo amalgama diversas teorías, ideas, conceptos, discursos y prácticas pedagógicas para intentar lograr la mejora continua en todos los niveles educativos.    

De Sousa Santos (2018), distanciándose del pensamiento crítico eurocéntrico, promueve una lucha tanto intelectual como política por el reconocimiento de realidades que en la historia occidental han sido ignoradas o invisibilizadas, es decir, “consideradas no existentes por la tradición crítica eurocéntrica” (p. 303). Para De Sousa Santos, tomar distancia de la tradición crítica eurocéntrica no significa desecharla, por el contrario, “significa incluirla en un panorama mucho más amplio de posibilidades epistemológicas y políticas” (2018, p. 304). Es decir, dicha toma de distancia favorece, por una parte, la subsunción crítica de ideas, conceptos y visiones del mundo a un contexto más amplio que desborda, en su sentido último, la perspectiva occidental. Por otro lado, tal toma de distancia “significa prestar especial atención a las tradiciones más pequeñas suprimidas o marginadas dentro de la gran tradición occidental” (2018 p. 304).

En este sentido, las epistemologías del sur se constituyen por la “producción y validación de los conocimientos anclados en las experiencias de resistencia de todos los grupos sociales que sistemáticamente han sufrido la injusticia, la opresión y la destrucción causada por el capitalismo, el colonialismo y el patriarcado” (De Sousa Santos, 2018, p. 306). Las epistemologías del sur buscan visibilizar lo ausente, logrando que emerja y sea conocido lo que estructuralmente ha sido ignorado. En clave pedagógica, las epistemologías del sur fomentan la búsqueda de conocimientos “que otorgan visibilidad y credibilidad a las prácticas cognitivas (en cuanto a enseñanza y aprendizaje) de los pueblos, clases y grupos sociales que han sido históricamente explotados, oprimidos, excluidos e invisibilizados por el pensamiento colonial” (Secretaría de Educación Pública, 2022, p. 96).

En el marco del nuevo modelo educativo, las epistemologías del sur promueven la emergencia de comunidades educativas en las que se impulse tanto la inclusión social como epistémica. Cabe señalar que, la inclusión epistémica busca la convergencia de los saberes científicos, filosóficos y comunitarios o populares para analizar, explicar, comprender y transformar el mundo de la vida. Más que una cesura, lo que favorece la inclusión epistémica es una complementariedad estratégica.

En términos didácticos, la complementariedad estratégica refiere a que la enseñanza formal tendría que ser impartida desde una visión multipolar, es decir, desde una visión en la que se divulguen los saberes científicos, filosóficos y populares que provengan de otras civilizaciones, además de la occidental. En otras palabras, desde un enfoque estratégico y complementario, los conocimientos ancestrales y contemporáneos que emerjan de naciones y regiones, tales como China, India, Rusia, Medio Oriente o Asia Occidental, África y América Latina, deberían hacerse presentes. Así, mediante la complementariedad estratégica se busca incentivar una educación formal que integre nuevas experiencias educativas y, curricularmente, subsuma críticamente el modelo educativo Science, Technology, Engineering, Arts and Mathematics (STEAM) de corte occidental.

Por otra parte, los criterios del nuevo modelo educativo son principios normativos que buscan hacerse patentes tanto en los contenidos temáticos de diversas disciplinas como en las acciones de enseñanza-aprendizaje. Con base en el artículo 16 de la Ley General de Educación (2019), la educación que imparta el Estado a nivel básico y medio superior responderá a los siguientes criterios: será democrática, nacional, humanista, respetuosa a las familias y al interés general de la sociedad, sostenible, equitativa, inclusiva, intercultural, integral y de excelencia.

Por su parte, el artículo 8 de la Ley General de Educación Superior (2021) sostiene que la educación superior se orientará con base en los siguientes criterios: el reconocimiento del derecho a la educación y a gozar de los beneficios del desarrollo de la ciencia y la innovación tecnológica; el respeto irrestricto a la dignidad; la igualdad sustantiva y de oportunidades; la inclusión y el reconocimiento de la diversidad; la interculturalidad; la excelencia educativa; la cultura de la paz; la accesibilidad; el respeto, cuidado y preservación del medio ambiente y la biodiversidad; la transparencia, el acceso a la información, la protección de datos personales y la rendición de cuentas; el respeto a las instituciones de educación superior, a la autonomía, a la libertad académica, a la libertad de examen y libre discusión de ideas; la responsabilidad ética; la participación de la comunidad universitaria en planes y políticas de educación superior; la preeminencia de criterios académicos para el nombramiento de autoridades educativas; la pertinencia en la formación de estudiantes con base en las necesidades actuales y futuras; la territorialización e internacionalización solidaria de la educación superior; el reconocimiento de habilidades y conocimientos adquiridos en la práctica y; el respeto a los derechos laborales de los trabajadores de las instituciones públicas de educación superior.

Nota final

Asumiendo que los efectos o las consecuencias de este nuevo modelo educativo aún están pendientes de calcularse, conviene señalar que, el trabajo proactivo de quienes se vinculan directa o indirectamente con la educación en México podrían generar que los criterios normativos señalados se transformen de posibilidades lógicas a posibilidades empíricas, facilitando con ello, la emergencia de comunidades educativas que promuevan la inclusión epistémica y la complementariedad estratégica.

REFERENCIAS

DECRETO por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de los artículos 3o., 31 y 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en materia educativa. Diario Oficial de la Federación, 15 de mayo de 2019.  

De Sousa Santos, B. (2018). Construyendo las Epistemologías del Sur. Buenos Aires: CLACSO

Secretaria de Educación Pública (2022). Plan de estudios para la educación preescolar, primaria y secundaria. México: SEP.  

Ley General de Educación. Diario Oficial de la Federación, 30 de septiembre de 2019, (México).  

Ley General de Educación Superior. Diario Oficial de la Federación, 20 de abril de 2021, (México).

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